Pincha sobre la imagen para ver el álbum ampliado y después en pantalla completa
Como sorpresa les tenia reservado a mis hijos un viaje a la que los ticos llaman Isla Tortuga y que su verdadero nombre es Tolinga (Deduzco que este nombre se lo habrán puesto por su semejanza a Galápagos, pensando en atraer más turistas. También corre el mito que vista desde el aire tiene forma de tal, cosa totalmente incierta. En realidad Isla Tortuga esta en Venezuela. Tampoco esta claro ni a quien pertenece ni que se puede hacer en ella).
En el embarcadero de Tambor nos espera Elvis en una buena panga de 110 CV. Enfila la cabeza del lagarto y desde allí pone proa a la isla.
>Buen maretón, nos cruzamos con la patrullera y hermosas vistas de la costa.
Recalamos en Isla Alcatraz y pasamos por el estrecho que separa a esta de la primera. La marea estaba baja y el fondo era poco por lo que había un rompiente que con una mala maniobra de Elvis podría haber hecho zozobrar la panga.
Fue lo mas bonito del día, el viaje hasta las islas.
Una vez desembarcados en la playa de Tortuga empiezo a escamarme al ver una gran fila de tumbonas de esas que los guiris utilizan para tostarse al sol, y la playa limitada por una serie de carteles en los que te advierten, que hasta allí era la zona pública, o sea que la isla propiamente dicha no la puedes ver.
Sale a recibirnos una jabalí, tan acostumbrada a los turistas que al vernos se pone panza arriba para que le rasquemos. Deben de haber gran cantidad puesto que a la hora que todo el mundo fue abandonando la isla se fueron acercando los salvajes y conté más de veinte.
Hasta aquí medio normal; habíamos llegado los primeros pero van llegando mas pangas, y ya de remate dos grandes catamaranes con multitud de viajeros, uno lleno de nacionales y otro de gringos. Todo muy organizado, horas de comida, con sus marimberos animando la fiesta, tostaduras al sol y muchas birras, sobre todo muchas birras.
Cojo gafas y aletas, me voy bordeando un roqueo en el que no hay ningún cartel que te impida el paso y llego a otra playa sin un alma. Descalzo no pude adentrarme en la isla pero estuve un buen rato desconectado de los guiris.
Comida que preparan entre Eva y Vanessa, nuevos baños y cuando nos iban a llevar a Jose y a mí a un islote coralino a bucear, nos avisan que la corriente es fuerte y peligrosa. Se fastidio el invento.
Van desapareciendo los guiris y se van acercando los jabalíes. Decidimos marcharnos nosotros también. La mar estaba brava y los pantocazos que daba la panga producían unas vibraciones que impedían no ya grabar, sino ni siquiera sacar imágenes.
Mis hijos acabaron contentos. Es lo que importa.
Estos pequeñajos parguitos son nuestra comida de hoy. Desconozco aun el acompañamiento.
Búsqueda en Google de: Isla Tortuga/Tolinga. Caí como un guiri
No comments:
Post a Comment